SALMÓN MARINADO
Este salmón pesaba casi 6 kg.
INGREDIENTES:
Un Salmón cortado en dos lomos
Sal y azúcar a partes iguales
Eneldo
Aceite de oliva
ELABORACIÓN:
De un salmón sacamos dos lomos.
Quitamos las espinitas que se nos hayan quedado con unas pinzas.
No le quitaremos la piel.
Preparamos la marinada con de sal, azúcar y eneldo.
El lomo que hemos preparado y limpiado lo introducimos en esta marinada.
Es conveniente que la mezcla de la marinada cubra por debajo, haciéndole una cama, encima colocamos la pieza y encima una capa abundante, que quede bien cubierto.
El tiempo de maceración dependerá del gusto de cada uno. Se puede ir vigilando y sacarlo a los dos, tres días o hasta una semana si gusta bien curado.
El salmón en maceración.
(la sal y el azúcar se hace liquido cuando pasa un día)
Aquí el salmón está curado, a punto de sacarlo
Cuando el salmón alcance la curación deseada lo sacamos de maceración, cortamos filetes de los lomos y lo introducimos en el aceite de oliva.
Podemos hacer para varias veces, lo metemos en el frigo listo para cuando queramos.
PROPIEDADES
NUTRITIVAS
El
salmón es un pescado azul que aporta unos 11 gramos de grasa por cada 100
gramos de carne. La grasa es rica en omega-3, que contribuyen a disminuir los
niveles de colesterol y triglicéridos plasmáticos, y además aumentan la fluidez
de la sangre, lo que previene la formación de coágulos o trombos. Por este
motivo, se recomienda el consumo habitual de salmón en caso de trastornos
cardiovasculares. El salmón es una excelente fuente de proteínas de alto valor
biológico, al igual que el resto de pescados.
Tiene
vitaminas pertenecientes al grupo B como la B2, B3, B6 y B9 y B12. y algunas
vitaminas liposolubles como la A y la D. La A contribuye al mantenimiento,
crecimiento y reparación de las mucosas, piel y otros tejidos del cuerpo.
Además, favorece la resistencia frente a las infecciones, es necesaria para el
desarrollo del sistema nervioso y para la visión nocturna. También interviene
en el crecimiento óseo, en la producción de enzimas en el hígado y de hormonas
sexuales y suprarrenales. La vitamina D regula los niveles de calcio en la
sangre y favorece la absorción y fijación de este mineral en los huesos.
Es
fuente de magnesio y yodo, y su contenido medio de hierro es inferior al de la
mayoría de los pescados. El magnesio se relaciona con el funcionamiento de
intestino, nervios y músculos. También forma parte de huesos y dientes, mejora
la inmunidad y posee un suave efecto laxante. El yodo es indispensable para el
buen funcionamiento del tiroides , así como para el crecimiento del feto y el
desarrollo de su cerebro.